sábado, 31 de enero de 2015

PYRGUS ARMORICANUS. NUEVA ESPECIE PARA LA PROVINCIA DE CÁDIZ


Pyrgus armoricanus es una de las doce especies del género Pyrgus (Hübner) conocidas en el territorio íbero-balear. En la mitad sur peninsular es una especie rara, pues sólo se ha citado de contadas localidades de las provincias Albacete, Ciudad Real, Córdoba y Sevilla.  Casualmente este hespérido lo encontré mientras realizaba el trabajo de Borbo borbonica zelleri en la localidad de Los Barrios-Algeciras (Cádiz) en una zona de pastizal de aprovechamiento de ganado vacuno,  a finales del mes de agosto de 2012. Ante semejante hallazgo hice mis mejores honores captando no sólo una cópula, sino además congelando el vuelo de un persistente y fogoso macho que sobre volaba la escena. Para congelar su movimiento con mi cámara, ésta la ajuste a modo ráfaga y a 1/1200s e ISO 800. Conseguí una serie de fantásticas tomas, una de ellas, ya publicada en entrada anterior, y otra la que aquí expongo a continuación. Mas detalles de este hallazgo serán publicados en la SEA.


Pyrgus armoricanus, Los Barrios, Cádiz
La dentificación de los hespéridos del género Pyrgus no son fáciles de identificar y con frecuencia es preciso recurrir a los estudios genitálicos, como en este caso se ha hecho gracias a  mi colega gaditano José Manuel Mateo Lozano.

Pyrgus armoricanus, Los Barrios, Cádiz
!Demasiado perfecta para ser verdad! Se diría...pero así fue, aunque tengo que confesar que lo único que hice fue  recortar parte de la imagen para conseguir el encuadre perfecto. No se utilizó nada de Photoshop (obsérvese la sombra del macho volando sobre la hembra), ni tampoco flash.

jueves, 20 de noviembre de 2014

LAEOSOPIS ROBORIS (Esper, 1793): DESCRIPCIÓN DE SUS ESTADIOS PREIMAGINALES



En anterior entrada ya hablamos del licénido Laeosopis roboris (Esper, 1793) y de su intensa interacción o mutualismo con las hormigas llamada mirmecofilia. Su ciclo biológico es bien conocido, auque repasando datos bibliográficos, no consta ningún trabajo que se describa e ilustre con detalle todos los estadios preimaginales, ya sea huevo, larva o pupa. Agenjo (1963) fue el primer autor que describió la oruga adulta y la crisálida de este licénido, pero a nuestro entender, la hizo de forma somera y apenas se refirió a los órganos mirmecófilos. En nuestra monografía de licénidos españoles  no llegamos a hacerlo por las limitaciones de su misma edición y también pensando en que sería más apropiado publicarlo por otros medios. Así que esta temporada ya tocaba hacerlo y aprovechando las enormes ventajas de los objetivos de fotomicrografía y el método de apilado de tomas. El trabajo está ya en prensa y pronto verá la luz en una conocida revista especializada. Adelantamos  aquí algunas de sus imágenes y comentarios.
Laeosopis roboris huevo


El huevo de L. roboris tiene un aspecto muy singular, recordándonos al de una botella achatada.


En el 1º estadio L. roboris presenta unas sedas muy largas y la placa protorácica  situada en el 1º segmento es muy visible con algunas cúpulas perforadas (PCOs). La oruga está en trance de muda, momento que es más factible realizar fotos de apilado. Fueron necesarias unas 50 tomas con objetivo Mitutoyo 10 x y pasos de 8 micras.

Últimos segmentos de la oruga del 1º estadio, señalándose las PCOs y el escudo supraanal. La glándula de Newcomer será visible a partir del 2º estadio.

  Detalle de los últimos segmentos de una oruga adulta de L. roboris y la glándula de Newcomer apreciándose con nitidez que la misma presenta dos orificios y no uno como en el resto de licénidos ibéricos.
Vista de frente la oruga en el 4º y último estadio se aprecia la placa protorácica de forma acorazonada  y provista de multitud de PCOs y varias cerdas ciliadas.
Glándula de Newcomer observándose que en su extremos, donde se encuentran los orificios,  existe numerosas cerdas ciliadas del mismo tipo que también se encuentran en la placa protorácica desde el 2º estadio larvario e incluso en la pupa.



Oruga adulta de L. roboris en prepupa y vista ventral de la cabeza y primeros segmentos.

 Pupa de L. roboris esconde interesantes secretos en su morfología. En apariencia su superficie  es lampiña, sin embargo observada a grandes aumentos encontramos dos tipos de sedas. Unas pequeñas y puntiformes que son las más abundantes, mientras que otras, las sedas ciliadas, se localizan en los extremos de la pupa.
Pupa vista por su parte superior, observándose con todo lujo de detalles su cutícula.
Últimos segmentos de la pupa.
Las pupas de L. roboris emiten sonidos estridulantes al igual que las de muchas especies de licénidos y ello obedece a unas estructuras localizadas entre los segmentos abdominales A5 y A6. El sonido es emitido por rozamiento de la placa estridulatoria con las filas de dientes. Estas estructuras tienen características únicas entre especies y géneros de los licénidos.



domingo, 29 de junio de 2014

Hemaris tityus (Linnaeus, 1758). Su redescubrimiento en la provincia de Granada

Hemaris tityus (Linnaeus, 1758), es una especie de esfíngido muy singular, al igual que todas las especies de su género, en lo que respecta a su morfología como insecto adulto, recordándonos por completo en su apariencia y modo de vuelo al de los abejorros. Lejos de ser casual y caprichosa, obedece a un patrón mimético llamado batesiano, esto es, emular la apariencia y comportamiento a otras especies peligrosas.  Este tipo de mimetismo está muy extendido en el vasto mundo de los insectos.



Huevo de Hemaris tityus a punto de eclosionar, donde se puede observar con todo detalle, la cápsula cefálica y las cerdas de la futura oruga. Sierra Huétor (Granada) junio de 2014, a  1400 m.
Fotografía realizada con fuelle y objetivo Ultra micronikkor 28 mm.
A grandes aumentos,  la oruga de Hemaris tityus es espectacular por su peculiar morfología, y como casi todo esfíngido, está provista  de un apéndice a modo de "cuerno" en su extremo posterior.  
Mata de Scabiosa en donde encontré los huevos y orugas de Hemaris tityus en la Sierra de Huétor

Hábitat de Hemaris tityus en la Sierra de Huétor y en donde también es bastante frecuente Hemaris fuciformis.


Hemaris tityus está menos extendida en la Península Ibérica que su congénere Hemaris fuciformis, presente en la mayoría de los sistemas montañosos. Las colonias más meridionales corresponden a la Sierra de Espuña y en Sierra de Alcaraz y sierras aledañas donde la he encontrado con relativa abundancia. No conocía su presencia en ninguna localidad andaluza, hasta que, a primeros del mes de junio de este año, en la granadina Sierra de Huétor me encontré, en una sola mata de Scabiosa, 3 huevos y 4 larvas en el 1º y 2º estadio de este esfíngido. Y no podían ser de Hemaris fuciformis, ya que sus orugas se alimentan de Lonicera (madreselva) y su morfología es inconfundible como se muestra en la imagen . Bastante contento con el hallazgo y casi a las puertas de publicarlo, pues no encontraba referencia alguna de su existencia en tierras granadinas, decidí comentárselo a mi amigo y colega granadino Javier Pérez López. Cual fue mi sorpresa a su contestación, en tanto que él mismo ya la descubrió años atrás, y publicó una pequeña y bien documentada reseña en la  revista SHILAP. Pero como él comenta, el la redescubrió, nada menos que casi cien años después de  que  Ribbe, renombrado entomólogo,  en 1912, publicara la presencia de este esfíngido como Hemaris scabiosae Z. en la provincia de Granada. Esta cita, según Rambur, no fue recogida por autores posteriores.
Probablemente este esfíngido esté presente en otras sierras andaluzas, aparte de Sierra Nevada donde posiblemente  la confirme esta misma temporada.

REFERENCIAS:

PRESENCIA DE HEMARIS TITYUS (LINNAEUS, 1758) EN ANDALUCÍA (SUR DE ESPAÑA) (LEPIDOPTERA: SPHINGIDAE).  PÉREZ LÓPEZ, J.  2011.  SHILAP Revta. lepid. 39 (155). 272.
















jueves, 20 de febrero de 2014

CYNTHIA CARDUI: EXPLORANDO SU MORFOLOGÍA

Especie cosmopolita donde las haya, la mariposa ninfálida Cynthia cardui puede vérsela volar por doquier desde primavera hasta bien entrado el otoño. Sus increíbles dotes migratorias, que le permiten desplazarse cientos o miles de kilometros y atravesar continentes, obedece, principalmente, a la ausencia de diapausa o letargo, ya sea en sus estadios inmaduros, huevo, larva o pupa, como en insecto adulto. Lo cual quiere decir que tiene generaciones ininterrumpidas. Durante el invierno, en la Península Ibérica,  a la Cynthia cardui la encontramos mayormente como oruga. Durante muchos años he colectado orugas en abundancia  sobre hojas de Malva sp en la costa gaditana y granadina.
No es una mariposa nada fácil de fotografiar por su comportamiento esquivo y nervioso. Con las últimas fotografías que he tomado, con aumentos superiores a 1:1, he descubriendo facetas de la morfología esta mariposa que desconocía por completo, ¡un mundo completamente nuevo por descubrir! y a falta del microscopio electrónico de barrido. Os pongo algunas de ellas a continuación.

Escamas del reverso del ala posterior de C. cardui a 20 x. Foto realizada con objetivo Mitutoyo y cámara nikon d800

Fémur y tibia de una pata de C. cardui, observándose su delicada escamación y espinas.

Ejemplar de C. cardui fotografiado ex-larva. La baja temperatura me ha permitido realizar la fotografia "en vivo" de esta mariposa.


Otra foto de la pata de Cynthia cardui. En este caso se ve con más detalle las espinas de la tibia y parte del tarso.

Detalle de la maza de la antena de Cynthia cardui. Fotografía realizada a 10 x con objetivo Mitutoyo.
Estos detalles morfológicos de las antenas van a constituir un sólido argumento para la cita, en breve, de una nueva especie de lepidóptero para la Península Ibérica.

domingo, 1 de diciembre de 2013

BORBO BORBONICA ZELLERI "EN MACRO EXTREMO"

B. b. zelleri (ex- cópula 4º generación)


Esta foto es una de las últimas que he realizado al hespérido Borbo borbonica zelleri, mediante el método de apilado de fotos. En este caso fueron necesarias 53 fotogramas. El objetivo utilizado es el macronikkor 35mm, flashes con pantalla difusora.
El ejemplar fotografiado estaba recién eclosionado. En otro caso, y en ejemplares gastados,  buena parte la delicada escamación de la cabeza se habría perdido.

A propósito de mi trabajo sobre esta especie recién publicado. Hace unos días un par de colegas catalanes, Marín Rondós Casas y  José J. Pérez De-Gregorio me hicieron saber un dato bibliográfico sobre esta especie y que aún era desconocido para mí. Fue toda una sorpresa, lo que algunos "personajes pueden liar" Os cito textualmente  el correo del segundo colega:  " Estimado Sr:    Mi amigo D. Martí Rondós me ha remitido el archivo adjunta, con su muy interesante trabajo sobre el hespérido Borbo borbonica zelleri.
     Al hablar de la distribución de la especie en España, he visto que aún recoge Vd. las citas catalanas del delta de l`Ebre (Tarragona) y de la vall de Llorà (Girona). Debo informarle que dichas citas posteriormente se supo eran falsas, debidas a un coleccionista barcelonés, fallecido hace años, que acompañado del recordado D. Juan de Ferrer Andreu capturó una serie de ejemplares  de B. borbonica zelleri en las cercanías de La Línea de la Concepción (Cádiz), y posteriormente regaló algunos de ellos con etiquetado falso de Catalunya a D. Miguel R. Gómez Bustillo y a mi, entre otras personas. En una palabra, que "nos tomó el pelo" a varios entomólogos ( y el pobre Bustillo llegó hasta a describir una supuesta nueva subespecie). Esas falsas citas catalanas ya fueron eliminadas, pero al parecer los autores del Atlas de Lepidópteros publicado por la SEA no se enteraron............     Reciba un cordial saludo y nuevamente mis felicitaciones por el trabajo,     José J. Pérez De-Gregorio".".

Desde aquí de nuevo les doy gracias a estos colegas. Tomo buena nota de su comunicado para ulteriores publicaciones y confirmar que las únicas poblaciones de Borbo borbonica zelleri, conocidas en el continente europeo, corresponden a la provincia de Cádiz.








sábado, 16 de noviembre de 2013

" LA MARIPOSA DEL ALMEZ": LIBYTHEA CELTIS ( LAICHARTING, 1782)

La familia Libytheidae (Boisduval, 1833), es una pequeña familia de mariposas, con 13 especies conocidas en todo el mundo. Una de ellas, la única que habita en la Región Paleártica, es  la Libythea celtis (Laicharting, 1782) o mariposa del almez en alusión a la planta nuticia de sus larvas: Celtis australis. En apariencia, esta mariposa nos recuerda a los Nymphalidae con los que está filogenéticamente emparentada. Un rasgo característico de su morfología son los palpos muy conspicuos y de longitud considerable de más de tres veces superior a la cabeza.
No es fácil de toparse con esta mariposa en el campo, a pesar de que está muy extendida prácticamente por toda la geografía peninsular. La mayor parte de su vida, transcurre como insecto adulto o mariposa incluyendo los meses invernales. En este sentido muestra similitudes con los ninfálidos vanésidos. A comienzos de primavera los imagos salen de sus escondrijos y revolotean por los caminos y lugares soleados para libar y aparearse. Es característico observarlas con sus alas extendidas al sol en el suelo o sobre la vegetación. Tan pronto como los árboles del almez empiezan a brotar, pueden observarse a las hembras patrullando por el ramaje de estos árboles, confiando un huevo por cada yema foliar. 
Los huevos eclosionan después de poco más de una semana de incubación. Las larvas se desarrollan rápidamene, siempre reposando en el envés de las hojas. Cuando son más fáciles de localizar es en el momento que las hojas del almez están poco desarrolladas y al mirarlas a contraluz, se delata la silueta de las orugas. La coloración de las larvas es normalmente verde,
si bien en cautividad podemos encontrar larvas muy oscuras. Aparte del camuflaje, las larvas tienen otro mecanismo defensivo muy eficaz. Cuando son molestadas se dejan caer agarradas a un hilo sedoso. Poco instantes después, haciendo acrobacias, se las observa trepar con rápidos movimientos de la cabeza y contorsiones del cuerpo al mismo lugar donde reposaban. Probablemente este gesto los salve de buena parte de sus depredadores naturales, particularmente parasitoides.
Las orugas pupan en el envés de las hojas y, por su forma y coloración, su camuflaje es igualmente muy eficaz. A los diez días, la eclosión de los imagos tiene lugar, allá por los meses de junio y principios de julio dependiendo de la localidad. Poco después de su nacimiento, esta mariposa tiene un comportamiento dispersivo hasta distancias considerables, llegando a alcanzar casi las altas cumbres de las sierras, donde se las puede localizar en los bebederos junto con otras mariposas.
Avanzado el verano,  L. celtis es más difícil verla y su encuentro es muy casual, como sucede en determinados días soleados del invierno.
L. celtis recién eclosionada, sobre flores de Cotoneaster, mostrando una escamación con tintes iridiscentes

L. celtis con las alas plegadas tiene un camuflaje extraordinario como aquí se muestra.

Lo que hemos hablado antes. Todo libiteido se distingue por los palpos extraordinariamente largos.
L. celtis sobre Santolina. Justo después de la eclosión es el periodo más propicio para toparse con esta mariposa.
Libythea celtis, recién eclosionada

Oruga adulta de L. celtis y nada menos obtenida en  los jardines de La Cartuja de Granada.

Oruga adulta de L. celtis, en "versión verde". Su morfología nos recuerda a las de Pieris.


sábado, 2 de noviembre de 2013

PARNASSIUS APOLLO. DETALLES DE SU ESCAMACIÓN ALAR.

Si hay una mariposa representativa de los escenarios alpinos de nuestras más altas montañas, esa es la especie Parnassius apollo (Linnaeus, 1758).  A pesar de que su área de distribución es muy extensa pues prácticamente cubre todas las zonas templadas y frías de Eursaria, sus poblaciones se encuentran muy fragmentadas y distintantes unas con otras. Nos encontramos una vez más con una mariposa de carácter relicto, testimonio vivo de tiempos pasados en que las glaciaciones imperaban por la mayor parte de Europa. De ella se han descrito, en exceso, numerosas razas o subespecies que deberían considerarse como sinonimias. Una de las más válidas que conocemos y de mayor interés biogeográfico es la ssp. nevadensis endémica de Sierra Nevada, caracterizada por presentar ocelos amarillo-naranja.
En esta entrada os pongo algunas fotos de este año. Las de escamas las he realizado con el método de apilado de 30 imágenes cada una, con mi objetivo favorito, el macronikkor 35 mm. y fuelle de extensión. Me ha sorprendido la variación en la morfología de las escamas en esta especie en función a su disposición.


Parnassius apollo nevadensis(Oberthür), La Ragua (Julio 2013).



Ocelo de las alas posteriores de P. apollo mariae, captada a contraluz. Llama la atención la redondez de las escamas y lo espaciadas que se disponen si las comparamos con otras especies de papiliónidos. Las escamas blancas nos recuerdan a los pétalos de las flores del almendro.

La misma imagen que la anterior pero con diferente iluminación y por tanto diferentes resultados. 


En esta foto se muestra detalle de la nerviación alar, muy prominente en Parnassius apollo que queda prácticamente al descubierto a las pocas horas de vuelo.

Borde alar de las alas anteriores de P. apollo mariae. Como se aprecia, esta zona la conforman tres tipos de escama muy distintas. Un tipo,  las situadas en el mismo borde,  las escamas están alineadas en 2-3 hileras y su forma es alargada y terminadas en dos puntas. El resto de escamas tienen una forma ahusada y algunas tienen una variación, imitando en parte a las del borde por presentar dos puntas.
La superficie de estas escamas se aprecia una textura  ondulada, parecida a la de otras tantas especies de lepidópteros.